La jubilación es un proceso de diversos cambios en la persona, esta etapa representa la reorganización en aspectos económicos, psicológicos y familiares. Es por ello que se sugiere, que la planificación sea una herramienta eficaz, para una adaptación que brinde equilibrio y plenitud a la persona.

Beneficios:

  • La posibilidad de descansar, de volver a cargarse de energía, de poder dedicar tiempo a otras actividades que se habían dejado de camino, o de iniciar otras más enriquecedoras para el espíritu.
  • Este puede ser un buen momento para fortalecer los lazos con su familia o reavivar esas amistades con sus antiguos compañeros de la escuela, colegio o universidad.
  • La posibilidad de, salir al aire libre, haga ejercicio, camine observando lo que hay a su alrededor, o contemple la naturaleza mientras realiza respiraciones profundas. Esto le ayudará a incrementar nuevos hábitos saludables.
  • Poseer el tiempo suficiente para mantener una dieta equilibrada, siendo usted quien prepara los alimentos y planifica cada una de sus comidas (sugerimos apoyarse de un nutricionista).

Errores comunes:

  • Aislarse de sus familiares y amistades.
  • Optar por estar todo el día en casa frente al televisor.
  • Iniciar con un consumo desmedido de alcohol, tabaco u otros.
  • No tener una rutina establecida o planificada.
  • No hacerse controles médicos, etc.

Nota: En caso de que el cambio cause malestar emocional, es importante acudir a un profesional de la salud mental.

Recomendaciones: ¿Cómo adaptarse?

Es importante poder mantener una organización y planificación para poder adaptarse de manera correcta, teniendo en cuenta la salud, las finanzas, y las relaciones con la familia y amigos. A continuación, te mencionamos algunos puntos que te pueden ayudar a una buena adaptación:

  1. Acepta lo que sientes: Es importante aceptar en la situación que nos encontramos en la actualidad y saber cómo vamos a seguir con nuestra rutina, y evitar pensar en aquellas situaciones que nos desgastan mentalmente.
  2. Ponte horarios: planificar y organizar los horarios para cada actividad que se van a realizar desde ahora, es de esta manera que se puede evitar caer en un aburrimiento o pasar mucho tiempo en la cama o en el sillón, ver la televisión, socializar poco, etc.
  3. No te pierdas fantaseando sobre el pasado: no te limites a pensar que “tu tiempo pasó”, es tu mente diciéndote mentiras, si tienes algo que te fascina y no lo pudiste hacer es el momento correcto para poder hacerlo de manera libre.
  4. Aprende cosas nuevas: comparte momentos con tus amigos, familia y conocidos, practica varios ejercicios que te permitan estar activo y mantener una mente sana.
  5. Cuídate: aliméntate de manera saludable, y realiza controles médicos contantemente, descansa lo necesario y de esta manera se podrá evitar acumulación de estrés y ansiedad.

 

Una buena adaptación supone cambios en nuestras actitudes, hábitos y creencias, para poder estar bien fisca y psicológicamente tenemos que tomar decisiones que nos ayuden a mantener una rutina de hábitos saludables.