“No les evitemos a nuestros hijos las dificultades de la vida, sino mas bien, enseñémosles a superarlas”
Louis Pasteur

El duelo es un proceso de adaptación normal, muchas veces provocado por el fallecimiento de un ser querido, cumple con algunas características generales:

  1. Es un proceso, esto quiere decir que requiere de tiempo y no se va a resolver de forma inmediata.
  2. Al ser un proceso, significa que es algo dinámico y por ende está sujeto a variaciones y usted puede tomar acción del mismo.
  3. Es natural atravesar un duelo, es una reacción habitual del ser humano y no es un proceso extraño. No es una enfermedad y al doliente no le ocurre nada malo por expresar sus emociones tras una pérdida significativa.
  4. Es un proceso único y por ende la forma en que responden al duelo los niños y los adultos es personal, cada individuo tiene un duelo diferente.

Siendo así, existen diferencias importantes entre el duelo infantil y el duelo que atraviesa un adulto, veamos cuales son:

  • Habitualmente, carecen de información relacionada a las pérdidas por lo que no suelen tener las herramientas necesarias para afrontarlo, se sugiere asistir a un especialista en el duelo, para orientar a la familia y dar acompañamiento al niño/a.
  • En su mayoría es un proceso nuevo para ellos, por lo que es normal que tengan muchas dudas y preguntas acerca del mismo, por favor responder desde el conocimiento, la empatía y la edad que tienen.
  • El apoyo familiar, y la mantención de rutinas son factores protectores e imprescindibles para la resolución del duelo.

A continuación, le presentamos algunos materiales y actividades que usted puede emplear en el acompañamiento de un duelo en un niño/a.

  • Cuentos: Son una herramienta muy útil al momento de acompañar al niño a laborar el proceso de duelo, algunos cuentos específicos sobre el duelo son:
    • No es fácil pequeña ardilla de Elisa Ramón: Cuento que narra cómo la vida continúa después de una pérdida, y como el amor sana las heridas de la ardilla.
    • La isla del abuelo de Benji Davies: Un cuento que nos muestra como las personas a las que queremos, permanecen siempre cerca, sin importar cuán lejos estén.
    • Un día todo cambió de Rakel Mateo: Es un cuento breve y muy ilustrativo que narra la historia de una niña que perdió a su hermana y como afronta su proceso de duelo.
  • Dibujar: Es una excelente forma para que los niños expresen sus emociones cuando no encuentran la forma de describirlas.
  • Mural para el recuerdo: En este mural, los niños estamparan la huella de sus manos y escribirán una frase o mensaje que recoja un recuerdo. También, añadiremos el nombre del ser querido que falleció con colores alegres.

Si en casa, tienes a un familiar de edad temprana, que está experimentando una pérdida por fallecimiento, quiero recordarte que no estás solo/a, desde la Unidad de Atención al Duelo de Funeraria Jaramillo estamos para acompañarte en este proceso. El amor curará nuestras heridas y el sanar, no significa olvidar.