Todos crecemos siendo conscientes de que nuestra existencia por este mundo es pasajera. Sin embargo, el miedo a la muerte es normal, y mucho evitamos pensar en este hecho por el temor que causa lo desconocido, a no saber cómo será ese momento, el miedo a que nos dejen nuestros seres queridos y, sobre todo el miedo a dejar de existir. Debemos comprender que este paso es parte del viaje llamado vida.

Este miedo puede llegar a ser un problema cuando pasa a convertirse en una fobia, porque afecta directamente a nuestro diario vivir.

¿Conoces o has escuchado algo sobre la tanatofobia?

La fobia a la muerte o Tanatofobia se comprende como un miedo permanente, desmedido e irreal ante la presencia de situaciones u objetos relacionados a la muerte o fallecimiento” (Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales [DSM-IV-TR, APA], 2004). Esta información se contrasta en la misma secuencia con los demás trastornos fóbicos, la exposición a ciertos eventos o pensamientos, en este caso a la muerte, provocando en la persona, una respuesta inmediata a la ansiedad (ejemplo, funerales, ver ataúdes, conversación sobre el fallecimiento) (Borda, Pérez, & Avargues, 2011).

Entonces, ¿qué? ¿A dónde has llegado? ¿Ya no tienes miedo a la muerte?

Continuamente podemos estar expuestos a pensamientos intrusivos, pensamientos que se generan como destellos de ideas en nuestra mente, a veces se estancan en nuestro diario vivir, como un pozo de agua que contamina nuestro ser y se desborda con las siguientes frases:

“Tengo miedo de que mi papá o mamá muera”, “Tengo miedo de que algo me pase, ahora que salgo de viaje”, “¿y si algo nos ocurre por hablar de la muerte?”, “prefiero evitar los funerales”, “hablar de la muerte, es llamar a la mala suerte”. ¿Te has sentido identificada o identificado? Pues es común encontrar en las conversaciones, estos miedos traducidos en palabras, pero ¿qué pasa cuando deja de ser una conversación, expresión o frase y empiezan a afectar a nuestro diario vivir?

¿Cómo reconocer que debo acudir a un profesional de la salud mental?

A continuación, te compartimos algunos síntomas que se pueden experimentar y que es necesario prestar atención:

 

Fuente: DSM-V-TR (2014).

Recuerda…

Si cumples con estos criterios es fundamental que puedas buscar un profesional de la salud mental, para con ello, realizar una evaluación de tu caso y posible intervención.

Te invitamos a realizar esta actividad:

Ve marcando un visto, frente a las acciones que estamos prestos a cumplir en nuestra vida diaria y que atenúan el miedo a la muerte:

 

Debemos aceptar que la muerte es parte de la vida y, mientras tanto, demos lo mejor de nosotros en el momento presente, procuremos desarrollarnos en el ámbito personal y profesional, construir el sentido a nuestra existencia. El miedo por la muerte nos acompañará pero no nos impedirá disfrutar cada momento como realmente lo merezca.

 

Compensa, pero no evites.

Aplaca el dolor, pero no lo canceles.

Anímate a seguir, pero no anules la pena.

-Jorge Bucay-