El duelo retrasado es muy común en personas que controlan sus emociones en exceso y se muestran aparentemente muy fuertes.

En el duelo retrasado o duelo congelado como lo denomina Willian Worden los dolientes no son conscientes de que el duelo no resuelto es la razón de muchos síntomas físicos y mentales. En el momento del fallecimiento del ser querido, no se produjo dolor o se inhibió la expresión de cualquier síntoma como llanto, tristeza, añoranza.

El inicio de este tipo de duelo se empieza a desarrollar al cabo de un tiempo, aunque en principio la persona pretenda ignorar su dolor, creyendo ser fuerte y demasiado optimista, por la falta de conciencia de lo que ha pasado, posponiendo la situación para más adelante; durante esta etapa se denominan síntomas inhibidos, suprimidos o pospuestos. La persona puede haber tenido una reacción emocional en el momento del fallecimiento del ser querido, pero no fue suficiente.

El duelo se hace, es un deber en la vida de las personas afrontar las dificultades, con confianza, fortaleza, serenidad, esperanza o paciencia. No se trata de ahogar las penas, ni hurgar en las heridas, sino que se trata de enfrentarse al sufrimiento con valentía, de buscar alternativas al sentimiento de víctima, de asumir responsabilidades, de no huir. Los sentimientos son adaptativos y nos permiten percibir y entender lo que es la compasión, la solidaridad, el afecto, la tristeza, la alegría.

FACTORES DE RIESGO MÁS FRECUENTES

• -Reacciones emocionales fuertes (estado de ánimo negativo, enfado, frustración, aislamiento de familiares y amigos).
• -Síntomas como apatía o insensibilidad. 
• -Deterioro y rechazo de acompañamiento y ayuda de otros familiares o amigos.
• -Excesivo miedo nocturno.
• -Trastornos en la alimentación o problemas para dormir. 
• -Sentimientos de culpa muy aferrados o pensamientos suicidas. 
• -Negar hablar sobre el fallecido.
• -Dificultad para deshacerse de pertenencias de la persona fallecida y dejarlas intactas por mucho tiempo o años.
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ESTRATEGIAS PARA AFRONTAR EL DUELO RETRASADO

• -No juzgue sus emociones ni se compare con otras personas.
• -No se diga así mismo como debería sentirse, ni permita que otras personas le digan cómo debería sentirse.
• -Permítase llorar y hable acerca de su experiencia, la vida y muerte de su ser querido.
• -Perdónese por lo que haya o no dicho o hecho, la compasión para usted y otros son importante para una elaboración de duelo sano.
• -Procure encontrar personas a las que pueda explicarles lo que está pasando, pueden ser familiares, amigos, terapeutas o religiosos.