Aunque el mundo esté lleno de sufrimiento, también está lleno de su superación.
Hellen Keller

Cuando un ser querido fallece, es natural y sano que se lleve a cabo un proceso de duelo. Sin embargo, en esta transición emergen muchas emociones y sentimientos productos del dolor, uno de ellos es el “resentimiento” que se define como el amargo y enraizado recuerdo de una injuria particular, cuyo desagravio se desea.

Su sinónimo es “rencor”, que proviene del latín, rancor (queja, querella, demanda). Por ejemplo, resentimiento en cuanto a que hayan quedado asuntos sin resolver, rencores o reclamos pendientes, en algunos casos es común que el sobreviviente haya estado distanciado o enojado con quien ha fallecido.

PARA TOMAR EN CUENTA:

Los resentimientos también pueden complicar el duelo.

CARACTERÍSTICAS DEL RESENTIMIENTO.

  • El deudo puede experimentar sentimientos de: soledad, inseguridad, falta de autoestima, culpabilidad.
  • Crítica hacia si mismo, hacia profesionales, familiares.
  • El doliente tiene memoria vivida del pasado, temor hacia el futuro, se instaura el dolor moral, hay pérdida de interés por el mundo exterior.