Tómese el tiempo que sea necesario para reflexionar sobre su tristeza y confronte los posibles problemas que le esperan.

La situación actual en la que vivimos nos ha dado como resultado cambios drásticos en nuestras vidas, y uno de ellos es la gran afluencia de desempleo y “pérdida de trabajo”, por lo que la persona atraviesa de manera inevitable un proceso de duelo; ya que el puesto de trabajo implica un arraigo o vinculación a personas, a un lugar físico y psicológico, costumbres y hábitos que deberán ser modificados en el nuevo ecosistema.

La persona también se enfrentará a la incertidumbre hacia el futuro, al miedo a afrontar nuevas exigencias, a la pérdida de la identidad que proporcionaba el puesto o la empresa, etc. En el ámbito familiar, hay una pérdida de un proyecto de vida que se había configurado alrededor del trabajo (formar una familia, tener hijos, comprar una casa, el prestigio social). Debido a los prejuicios y a los estereotipos sociales, a la familia que se encuentra en una situación de desempleo de alguno o varios de sus miembros, le preocupa que se enteren sus amigos, lo que la puede conducir a la adquisición de deudas (préstamos, uso indiscriminado de tarjetas de crédito, etc.) para tratar de mantener el nivel de vida que acostumbraban llevar.

PASOS PARA ELABORAR EL DUELO POR LA PÉRDIDA DE UN TRABAJO

  • Mantener la esperanza.
  • Re-establecer una identidad positiva.
  • Construir una vida con sentido.
  • Asumir responsabilidad y control.

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